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Explorando las Profundidades de la Sanación a través del Sonido: Desentrañando el Poder Transformador de la Vibración
En el vasto lienzo de la existencia, el verbo emerge como la fuerza primordial que teje nuestra realidad y la del universo en su totalidad. Desde la enigmática sílaba raíz Om, una vibración no pronunciada pero palpable en el cuerpo, hasta la intrincada relación entre el sonido y la vibración, se despliega un misterio que abarca desde lo más profundo de nuestro ser hasta la expansión del cosmos. En el corazón de todas las tradiciones antiguas yace la comprensión de que el sonido es esencial en la creación del universo.
El Oído Interno como Puerta de Entrada:
En nuestro desarrollo, cuando aún somos embriones, el primer sentido que se desarrolla es el oído interno. El sonido viaja 5 veces mejor por el agua que por el aire. Así, en el vientre materno, el oido es la experiencia total. El sonido que llega al embrión, es esencial para su desarrollo e irá conformando su sistema nervioso. El sonido es el primer sentido que se desarrolla y el ultimo que se pierde al morir. Las civilizaciones antiguas, consciente de ello, siempre han utilizado los sonidos y las palabras para sus rituales. Es a través del sonido, que conectamos más directamente con la fuente y con nosotros mismos.
El Valor de la Palabra.
En la tradición gnóstica, la existencia está representada con un círculo y un punto en el centro ( nuestra esencia). El círculo exterior representa el inframundo. A través del sueño, podemos conectar con el área que representa el punto. Los mándalas budistas son una expresión del sonido en la materia. Nosotros somos materia, y si nos vemos sometidos a los sonidos armónicos, nuestro cuerpo se armoniza nuevamente y puede sanarse. Todas las culturas ancestrales han dado un gran valor poder al canto y al sonido.
UNA PALABRA TUYA, BASTARÁ PARA SANARME.
El poder de crear con la palabra, vienen de la COHERENCIA, alineación absoluta e integridad entre lo que pensamos, decimos y hacemos. Con las palabras que pronunciamos , interferimos en el cuerpo.
Cuando un objeto es golpeado por un elemento armonizado, surge un punto de coherencia entre ambos. Nuestro cuerpo responde de manera similar a los sonidos armónicos, encontrando la armonía perdida.
Elevando la Vibración: La Clave para Abrir Puertas Superiores:
El sonido es la clave para abrir realidades o puertas superiores, dentro de nosotros mismos. Nuestro camino es elevar nuestra vibración. La polaridad permite que haya atracción o repulsión, y con ello, permite el movimiento, que es la clave de la vida.
El cuerpo humano funciona como un instrumento musical, con cada órgano, tejido y hueso en un constante estado vibratorio. Cada parte de nuestro cuerpo tiene una cierta vibración que necesita mantener para estar en cierto grado de armonía , coherencia y bienestar. Con la desarmonía, llega la enfermedad.
Cuando estamos sanos, todas las partes de nuestro cuerpo resuenan en coherencia y vibración armoniosa. La frecuencia y la intención posibilitan la sanación. Así, podemos usar el sonido y la voz de una manera muy coherente para que nos ayude a sanar.
El cuerpo humano es un instrumento complejo que precisa de sus propio sistema natural de mantenimiento. Cada célula es un transmisor, resistencia y condensador. Somos un circuito de compuertas. Somos receptores y emisores de fotones. Y lo hacemos a través del proceso natural de auto-regulación.
Nuestra tarjeta madre humana, consta de dos centros vitales: Corazón y Cerebro. Cada uno emite un cuerpo electromagnético. Cuando ambos están en resonancia y sintonía, se da el proceso de Coherencia, permitiendo un estado expansivo de la conciencia, pasando a estados theta o gamma.
Así nos beneficiaremos de la alineación de nuestros órganos, glándulas, meridianos, y chacras, armonizando todo nuestro cuerpo. Escuchar y sentir música alinea el cerebro, activando el cuerpo calloso que une ambos hemisferios cerebrales.
EL UNIVERSO ES EN REALIDAD UNA SINFONÍA CÓSMICA QUE LE CANTA UNA CANCIÓN A SU CREADOR.
Culturas Ancestrales y el Camino de la Sanación:
A lo largo de la historia, culturas ancestrales de todo el mundo han utilizado una diversidad de instrumentos sonoros para guiar al ser humano hacia estados expandidos de conciencia. Desde tambores y didgeridoos hasta cuencos de metal y cristal, flautas, ney, liras y arpas y la voz misma, mantras y rezos; estos instrumentos han servido como puertas hacia otras sabidurías y realidades, facilitando la sanación del cuerpo, la mente y el espíritu.
De este modo, el sonido, con su capacidad de conectar lo divino con lo terrenal, se erige como una herramienta poderosa para explorar las profundidades de nuestra existencia. En cada vibración, encontramos la clave para desentrañar los misterios que yacen en lo más íntimo de nuestro ser y en la inmensidad del universo.
¿Estás listo para sumergirte en la sinfonía sanadora del sonido y explorar las vastas posibilidades de tu propio ser? Si es así, enriquécete con los sonidos sanadores ancestrales.
1 Comments
Alfredo Calvo Dombón
Precioso. Una invitación a bailar y a vibrar con el cuerpo para reunirme con el cosmos, tal y como era en el principio. Gracias Pedro.